Ordinario es un adjetivo que se emplea para referirse a algo o alguien común, corriente o sin nada destacable. Se emplea para resaltar la falta de características especiales o condiciones privilegiadas. Por ejemplo: Es una persona ordinaria, sin atributos especiales.
También puede usarse para referirse a algo que sucede en forma habitual. Por ejemplo: Voy a la escuela a diario, así que mi vida es bastante ordinaria.
En el ámbito jurídico, el término hace referencia a aquellos procesos en los cuales no hay partes interesadas ni conflictos entre ellas. Los asuntos ordinarios son aquellos en los cuales un juez dictamina sobre los derechos y obligaciones de una persona sin contar con la presencia de partes contrarias.