El microscopio óptico fue inventado por el holandés Antonie van Leeuwenhoek en 1676. Van Leeuwenhoek era un comerciante de lana que también trabajaba como maestro de escuela y científico aficionado. Utilizó lentes de baja potencia para construir sus primeros microscopios, los cuales eran capaces de ampliar objetos hasta 270 veces. Esto le permitió descubrir bacterias, glóbulos rojos y otros organismos microscópicos.
Van Leeuwenhoek desarrolló una variedad de microscopios ópticos, incluyendo un diseño libre de aberración, que mostraba imágenes más claras que los diseños anteriores. Usando sus microscopios, presentó a la Royal Society de Londres varias descripciones detalladas sobre lo que veía a través del microscopio. Estas descripciones contribuyeron al conocimiento humano sobre la biología y el mundo natural.