El reloj fue inventado por primera vez en el siglo XV en Europa, aunque los relojes estaban presentes mucho antes. Los primeros relojes eran mecanismos de rueda y se usaban para marcar el tiempo de la iglesia. El primer reloj mecánico fue creado por Peter Henlein en 1510. Estos relojes funcionaban con un mecanismo de resorte que usaba un peso para impulsar los engranajes. A fines del siglo XVII, el relojero alemán Christian Huygens inventó el primer reloj de resorte de bolsillo, lo que permitió llevar los relojes a todas partes. A finales del siglo XIX, los primeros relojes eléctricos aparecieron en el mercado. Estos relojes usaban baterías para mantenerse al día y eran mucho más precisos que los mecánicos. Desde entonces, los avances tecnológicos han cambiado drásticamente la forma en que medimos el tiempo. Los modernos relojes electrónicos digitales son muy precisos y se pueden encontrar en una variedad de dispositivos como teléfonos inteligentes, computadoras portátiles y tabletas.